Te extraño y cada cosa que veo me recuerda a ti. Simplemente se me olvido como dejar de pensar en ti....

Nadie entiende vuestra relación

Nadie entiende por que tanta devoción

Nadie concibe el hecho de que vuestro amor trasciende más allá de lo imaginable

Mas allá de lo tangible, mas allá de lo explicable…

Cuenta una historia, tan vieja como la misma existencia de la humanidad, que cuando la luna nació en el misterioso universo, le fue concedido un deseo y ella pidió nunca sentir la soledad, pues el padre tiempo y la madre espacial, le regalaron una estrella, pero no una estrella común y corriente, si no una que de día era estrella y de noche era un bello gato. Cuando la luna vio aquel maravilloso espécimen pensó que no era digna de tal demostración de afecto, pensó.: ¡No merezco esto!

Al pequeño gato observar tal reacción, se acerco a ella, y simplemente permaneció a su lado. ¿La luna al ver tal acción, le pregunto que haces?

El gato le respondió: Solo estoy cuidando de ti y prometo nunca dejarte sola, aunque mi luz se apague algún día y mis ojos se cierren para nunca volver a verte resplandecer, siempre estaré aquí, porque simplemente ¡Te amo!

En ese mismo instante, la luna sintió que cada parte de su ser se estremeció, lo abrazo y le susurro, yo también te amo, porque por primera vez desde que fui creada me siento protegida y amada.

A partir de ese momento fueron el complemento perfecto. Todos aquellos que componían el universo no comprendían el porque de esa unión, parecían algo mas que hermanos, aunque solo ellos sabían que no necesitarían explicar lo sentían.

¡INCESTO! Grito un día Venus.

La luna y el gato solo sonrieron, pues sabían que era solo una broma que les hacia su vecina la Venus y no precisamente del Nilo... (jijiji)

Nadie entiende vuestra relación.
Nadie entiende por que tanta devoción.

Mientras menos sabemos más felices seremos. El destino a presentado ante mi dos mundos tan distintos, con metas en la vida totalmente a lejanas en principio pero que al final de cuentas su finalidad es la misma y es ayudar a la humanidad. El mundo de sol, es joven, inexperto, aun esta en la fase de aprender a tener control de sus sentimientos los cuales controlan la temperatura de lo que el representa… Es un mundo donde las estrellas fugaces que pasan y lo visitan de cuando en vez son tan importantes como aquello que el realmente quiere. Las opiniones de cómo debería seguirse formado son igual de importantes que su conciencia misma.

    Por otro lado esta el mundo de las manzanas, un planeta, formado, con todo bien puesto, cada cosa que ha hecho lo hizo con firmeza, con seguridad, que tuvo una que otra duda en el camino, es normal.. En el conglomerados de planetas, el no es la excepción y tuvo sus momentos de poca claridad. Pero aun así es especial.

    Estos dos planetas han intentado conquistar a la Luna, ambos coinciden o al menos el de las manzanas asegura que la Luna es simplemente perfecta, pero también admite que quizás conoció a la Luna un poco tarde, tarde por que quisiera tenerla en otra forma, pero en la misma medida asegura que la conoció en el momento oportuno por que ella llego en el punto que el necesitaba alguien como la Luna que podría aportarle tantas cosas a su planeta que eran necesarias, pero sobre todo que le daría fuerzas para seguir combatiendo en la lucha campal contra el mismo y la humanidad.

     El mundo de las manzanas es el ejemplo perfecto que de lo que la Luna siempre quiso tener, tiene todas las cualidades que ella entiende que necesita y quiere en alguien que podría compartir los millones de años luz que tiene y tendrá de existencia en el universo. El mundo de las manzanas es perfecto para ella.

     Pero! Esta el mundo del sol, cuenta la historia, que cuando se estaba formando el universo, al momento de crear el mundo del sol y a la Luna, estos nacieron juntos por eso es que son el complemento perfecto, pero que por que lo mal portados que fueron y por la necesidad que tenia el gran Creador de darle a cada quien su espacio y su función para que todo estuviera como debería, los dividió. El mundo del sol seria un lugar donde primaria la claridad del día y la Luna seria un planeta donde su fuente de vida seria la oscuridad y la noche seria su confidente. Y así fue como de ser el complemento perfecto, se volvieron tan diferentes y distantes el uno del otro, aunque no podrían nunca estar separados por que su naturaleza creaba una atracción tal que no se podían permitir estar distantes, ni uno ni otro se perseguían. Pues es aquí el problema, la Luna quiere con cada parte de si misma al mundo de las manzanas pero no puedo alejarse del mundo del sol.

     La Luna desea tanto tener al mundo de las manzanas, pero están tan distantes en tiempo y espacio, que solo se pueden ver por las imágenes que tienen, por la intervención del señor recuerdo, que les regala un ligero y minúsculo momento de felicidad.

La vida es una hipocrecia

La vida es una hipocresía como dijo una vieja amiga, todos jugamos a ser protagonistas aunque sea por una vez. Unos al principio lo intenta, otros al final, pero lo hacemos…

Ser o corresponder son las dos cuestionantes más comunes ante tales situaciones, puesto que no sabemos si ser hipócritas cuando lo son con nosotros, o corresponder y aceptar tan plebeya demostración de inferioridad ante un peligro mínimo pero considerado en esos momentos como inminente. Que hacer?

No se porque, me gusta así, tenerte tras mi espalda.

Pintándome palabras, tu estate quieto y ven aquí.

Eres como un niño grande.

Descubriendo aquello que le llama la atención por primera vez.

 

No se porque, me gusta así, que nadie sepa lo que es.

Saltándome las reglas imaginare alguna vez,
Corriendo y siendo por primera vez feliz.

En la playa, en la calle o en cualquier estado..

Y hacerte caricias que me has enseñado

Y aquella que hemos inventado.

 

Me gustas tal cual eres
Distante, pensativo y un tanto posesivo.

Me gustas así
Cual planeta esperándose descubrir.

 

Me gusta como te gusto.

Me gustan tus miradas y tus “Te quiero”.

Me gusta cuando de cuando en vez callas

Por que se que algo maravilloso escondes

Por que se que quieres que te sorprenda
 intentando tal hazaña....

Ando medio melancólica y triste. En estos últimos días me han sucedido tantas cosas, desde buenas hasta no muy buenas, pero de todo lo que me ha pasado estoy muy agradecida de Dios, pues soy fiel creyente de que todo pasa por alguna razón. Hace algunas semanas, tuve el privilegio de conocer un niño, a penas 17 años tiene y recién salido de la secundaria. Su presencia y el conocerle fue de gran impresión en mi persona, porque cuando lo vi, pensé que era un niño mas que fue en busca de ayuda a la organización de la cual soy parte, pero en el momento del despeje mental-ocio, el vio un piano y simplemente se sentó, nadie le estaba prestando atención pero la conexión que sentí al ver como el ejecutaba una pieza de jazz basto para que fuera dueño y señor de mi tiempo y mi atención por un buen rato. El piano en mi vida señores significa algo importante, aunque aun no he podido aprender a tocarlo, cosa que espero que sea en su justo y necesario tiempo, es un instrumento con el cual me siento identificada, porque tiene sonidos graves y leves, es decir, es sumamente intenso como yo, pero sin matices, es enteramente blanco o enteramente negro, nunca gris...

Pues así me he sentido últimamente, en el vaivén de las intensidades, un día estoy sumamente extasiada por alguna buena noticia, y otro día un intento fallido de ilusión tan rápido como decir “Dos” me aniquila sin pedir permiso y sin pedir perdón, la sombra de lo que creí sentir en ese momento de felicidad. Es que la línea que divide la felicidad de la tristeza es tan delgada como el hilo que con tanto empeño teje una araña. Por otro lado, en uno de mis momentos de reflexión, a veces siento que todo esto que estoy viviendo actualmente es una especie de eco, una repetición constante de lo mismo, es que son actores secundarios distintos, pero misma trama y misma protagonista, ese sonido vacío, bizarro, y desconcertante se ha vuelto repetitivo, pero a la vez adaptable, por que siempre caigo en lo mismo.